Proceso
Verificación inicial
En la primera etapa se retirán todos los residuos que se alojen en los cascos ya que esto es fundamental para minimizar la contaminación y garantizar la calidad en las siguientes etapas del proceso. Luego de un minucioso análisis, el neumático es evaluado para detectar daños o roturas internas (base, talon y laterales) En caso de que el casco este en perfectas condiciones se pasa directamente al pulido, caso contrario continua hacia el sector de reparado.
Reparado
En caso de que el casco así lo requiera, se realizan las reparaciones necesarias. En primer lugar se marca la zona afectada, se pule dicho sector con una pulidora automática, luego se quitan las partículas de polvo con un aspirador completamente limpio para luego colocar cemento y finalmente adherir el parche sobre el daño. Una vez cementado de deja secar y encojinar.
Pulido
El proceso de pulido se realiza en una maquina automática con radio de giro, la cual pule el neumático con una raspa especial evitando daños. Luego se deben escarear los daños o roturas que se hagan visibles por el proceso de pulido para finalmente cubrir el neumático con una capa de flux, este último paso se lo conoce como cementar.
Preparación de la banda
Primero se mide el ancho del neumático para utilizar la banda correspondiente. Luego de seleccionada la banda, se estira y se le aplica una capa de flux, esto ayudara a la adherencia al neumático.
Colocación de la banda
Antes de colocar la banda sobre el neumático primero se rellena la zona escareada con un cordón de “cojín” (caucho en proceso que permite la fusión entre la banda y el neumático en el proceso de vulcanizado) y luego se utiliza un rollo de cojín más grande que recubre todo el neumático en su contorno, sobre el cual se coloca la banda. Finalmente se cortan los sobrantes de banda, se pulen y cementan los extremos. Para finalizar se ejerce una presión de 1.5 kg para quitar todo el resto de aire entre la banda y el neumático.
Vulcanización
Luego de colocar la banda, el neumático es cubierto con un envelope (cobertor externo) y un inerlope (cobertor interno) a los cuales se les quita todo el aire a través de un sistema de vacío para verificar por última vez que no exista ninguna rotura para el proceso de vulcanización. Finalmente se coloca la cubierta en las autoclaves que generan una presión de 6kg y una temperatura de 115º en el tiempo de 3 hs que dura este proceso. Completado el siclo se retira el neumático.
Inspección final
Finalizado el vulcanizado en neumático, se verifica por medio del color, textura y elasticidad del material el correcto resultado del proceso. Luego se pule el sobrante de material, se realiza un trabajo de pintura y etiquetado del neumático para su entrega.